Desde su llegada a América Latina, las microfinanzas revolucionaron el mercado facilitando la inclusión financiera con préstamos dirigidos a la base de la pirámide, quienes por años habían sido excluidos del sistema financiero tradicional por no cumplir con los requisitos que solicitaban.
A la fecha existen 2000 millones de adultos que no cuentan con servicios financieros básicos, sin embargo, más de 1700 millones tienen un teléfono móvil; y esa es la razón por la que las nuevas tecnologías juegan un papel fundamental para llegar a más gente.
La tecnología tiene un impacto en cómo las personas se relacionan con los productos y servicios que adquieren, lo que potencia las ganancias de las instituciones microfinancieras sin comprometer sus cualidades.
La forma de trabajo de las microfinancieras consta en conocer los negocios y los perfiles de las personas a fondo para calcular la capacidad de pago y el monto del crédito que se les puede ofrecer. De forma que la tecnología facilite el trato personalizado con los clientes.
Las nuevas tecnologías deben implementarse desde la operación para agilizar procesos, reducir tiempos y recolectar data para analizar el comportamiento financiero de los usuarios.
Según el Banco Mundial, gracias al desarrollo tecnológico de los últimos 10 años, las microfinancieras han podido incorporar pagos móviles, banca móvil e identificación biométrica, debido al abaratamiento los servicios financieros, facilitando el acceso en zonas aisladas y permitiendo que los cobros, pagos y transferencias se digitalizaran.
Otro ejemplo del uso de tecnología es cuando los asesores financieros pueden utilizar aplicaciones móviles para registrar los datos de los usuarios de formas más rápidas, incluso colaborando con el cliente para llenar formularios.
Sin embargo, la tecnología necesita de un proceso para adaptarse de forma correcta, empezando por definir las prioridades y objetivos del negocio para de esta forma investigar sobre las posibles soluciones tecnológicas e invertir en ellas, culminando en la digitalización de datos.
La tecnología se ha convertido en un instrumento vital para la inclusión financiera gracias a que agiliza y reduce costos, permitiendo a los intermediarios financieros brindar productos y servicios a la base de la pirámide.
La innovación tecnológica apoya al sector microfinanciero para dar una mejor respuesta a las necesidades de los clientes, incorporando tendencias y novedades en sus productos y servicios.
